La figura de un cabecero, es un elemento esencial en el dormitorio. Es uno de los pilares fundamentales en que todas las miradas llevan a su atención. El cabezal nos ofrece seguridad en el descanso.
Son inmensos los estilos disponibles en el mercado, desde la madera a juego con el resto de mobiliario, pasando por la forja, tapizados, murales de papel o pinturas.
Hoy en día, cada uno intenta crear su propio cabezal, creando originales diseños; como restaurar una puerta de madera, palets u otros objetos. La creatividad y la originalidad en los cabeceros los hace limitados y únicos.
La forja vieja, restaurada y lacada, aporta a los dormitorios un estilo retro, que coordinando con textiles de flores y rayas, crean un ambiente coqueto y agradable.